No hay necesidad de alejarse de Lima para disfrutar de la naturaleza y la aventura. Y es que existen muchos atractivos para una escapada de fin de semana en el llamado Norte Chico, que comprende a ciudades como Chancay, Huaral, Barranca, Huacho o Puerto Supe.
Así que te contamos las buenas razones para visitarlo a pocas horas al norte de Lima para disfrutar de actividades de aventura al aire libre, degustar la gastronomía, conocer hermosas playas, y mucho más.
Castillo de Chancay
Ubicado a una hora y media al norte de Lima, en la ciudad de Chancay, este castillo fue construido en la década de los años veinte sobre un acantilado de rocas, a orillas del Océano Pacífico. Es considerado uno de los atractivos más visitados del norte chico. Miles de turistas llegan cada año para recorrer sus intrincados pasadizos, apreciar sus salones y conocer las cerca de 250 habitaciones que albergan colecciones de piezas preincas y torreones desde donde se tiene una vista privilegiada del litoral.
El lugar ofrece música y danzas en vivo, cuentos temáticos para niños y para toda la familia, presentaciones de estilo medieval y concursos para el público. Actualmente cuenta con hotel, restaurante y piscina. Como parte del recorrido, también puedes visitar el Museo Municipal de Chancay donde se exhiben piezas arqueológicas de la cultura local y reliquias de la Guerra del Pacífico.
Santuario arqueológico de Pachacámac
Está conformado por grandes templos piramidales y edificios con rampas. Durante más de 1 500 años, fue un lugar sagrado para varias culturas, pues estuvo consagrado al dios más importante de la costa peruana, Pachacámac. De él, se decía que era el creador del universo y la fuerza que animaba a todos los seres vivos.
En su interior, destacan el templo del Sol y el de la Luna o Acllahuasi, ambos construidos durante el apogeo de los Incas. Asimismo, puedes conocer el famoso oráculo, capaz de predecir el futuro según la leyenda, y que fue punto de encuentro durante muchos años de los habitantes andinos quienes acudían a él para encontrar respuestas a sus interrogantes.
En el lugar también se encuentra el Museo de Sitio de Pachacámac que muestra las distintas piezas halladas en la zona, como cerámicas y textiles, así como la puerta de la cámara del ídolo -representación de la deidad-.
Antioquía
A 70 km al sureste de Lima -son cerca de 3 horas de viaje- se ubica uno de los pueblos más encantadores y pintorescos que tiene la región: Antioquía. Aquí viven cerca de mil habitantes en sus casas pintadas de blanco y decoradas con dibujos de ángeles, flores y animales, muy al estilo de los famosos retablos ayacuchanos.
Los moradores se dedican al cultivo de manzanas, membrillos, chirimoyas y duraznos, y a la fabricación de mermeladas, néctares y vinagres para la venta.
En el camino a Antioquía, puedes visitar el pueblo de San José de Nieve Nieve y emprender la ruta a Sisicaya y su camino inca. Para llegar debes tomar un bus que parte desde la avenida Rosa Toro en San Luis (Lima) hacia Cieneguilla, para luego desplazarte en colectivo hasta el colorido poblado.
Azpitia
Conocido como «El balcón del cielo» por su inigualable vista del valle del río Mala, aquí podrás disfrutar del aire puro y de la gastronomía local. Este lugar brinda una serie de restaurantes campestres cuya especialidad son los camarones, que se sirven todo el año, a excepción de la temporada de veda.
El pueblo de Azpitia es muy reconocido también por su producción de vinos y piscos, por lo que cuando visites este hermoso lugar no olvides recorrer sus distintas bodegas donde conocerás más sobre el proceso de elaboración de estas bebidas.